Alexis Esquivel. Republique Light, 2011, Acrílico sobre tela, 78 x 100 cm
La tradición negra radical en Cuba, y el marxismo (4)
Ver entregas anteriores de esta serie: 1, 2 y 3
Nota:
Aquí explico el origen del presente intercambio. Las respuestas versan, en lo fundamental, sobre las siguientes preguntas:
¿Qué te parece la calificación de “marxismo negro” aplicada a figuras como Sixto Gastón Agüero, Juan René Betancourt o Ángel Pinto Albiol? ¿Es pertinente? ¿Prefieres otra manera de calificarlo?
¿Quiénes integrarían, en tu opinión, el cuerpo del marxismo negro, o, en general (aunque no lo es mismo), de marxistas negros en Cuba entre 1902-1958?
¿Puede hablarse de un “marxismo negro” en Cuba después de 1959 hasta hoy?
Si tu respuesta es positiva, ¿puedes sugerir nombres y obras relevantes que integrarían ese “marxismo negro” desde 1959 hasta la actualidad en Cuba?
Reitero aquí que el objetivo del intercambio, más que comprometerse con una “manía clasificatoria”, es:
“En ese horizonte, es necesario situar ese pensamiento como parte de los debates y procesos políticos de los que participaron y no solo limitarnos al estudio de sus ´ideas´. Esto es, tratarlos como sujetos políticos, contemporáneos de su tiempo —cosa que hace el curso mencionado y que es necesario seguir haciendo— y no solo como ´archivos´ para su estudio por parte del investigador actual.”
En esta ocasión aparecen las opiniones de Zuleica Romay, Esteban Morales, Yasmín Silvia Portales y Alberto Abreu Arcia. (Julio César Guanche
La tradición negra radical en Cuba, y el marxismo (4)
Zuleica Romay
Los esencialismos son tan excluyentes como los racismos. De ahí que parte de la intelectualidad de los sectores subalternos muestre reticencia ante clasificaciones que incluyen “lo negro”. A mí me resulta esencialista y peyorativo clasificarme como negra marxista; o sea, negra y, además, marxista. Por eso prefiero invertir los términos, del mismo modo que me asumo cubana y negra, mujer y negra, intelectual y negra, nunca al revés.
Eso no significa que yo reconozca la existencia de un marxismo negro. Pensando en la antinomia de las razas: las razas no existen, pero el racismo sí, yo diría que el marxismo negro no existe, pero los marxistas negros, sí. Para mí, el término marxismo negro funciona más como una metáfora, o una etiqueta que facilita ciertos propósitos didácticos. Como criterio metodológico me resulta ambiguo y frágil y, en el caso de Cuba, bastante problemático.
Si el segundo vocablo de este tipo de formulación suele corresponderse con la matriz ideológica y las prácticas políticas que alimentaron los desarrollos teóricos del marxismo (marxismo aprista, trotskista, etcétera), ¿por qué a la corriente del marxismo marcadamente anticolonial se le apellida “negra”?
Si no se pueden homologar colonialismo y esclavismo porque el primero ha sobrevivido y se ha reproducido más allá de la experiencia de la esclavitud, ¿por qué reducir a lo negro esta corriente del marxismo, para después enredarse con la explicación? ¿Será para compensar una “falla de origen” de la teoría marxista? ¿Que, siendo creación de hombres europeos, habitantes de ciudades industriales, no podía asumir como centro la crítica del colonialismo, porque sus teorías no se nutrieron de la experiencia colonial? Seguir leyendo «La tradición negra radical en Cuba, y el marxismo (4)» →
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